La Policía Nacional se quejó de que en el país se registra “un recurrente aumento en el número de personas apresadas los fines de semana durante el toque de queda.
Dijo que esas personas son atrapadas circulando por las diferentes valles y avenidas del país “violentando el toque de queda”.
“Por ejemplo, si en la semana laboral (lunes a viernes) los apresados oscilan entre los 500 y 700 personas, los sábados y domingos esas cifras superan los 1,000 detenidos”, acotó en una nota de prensa.
Indicó que la situación, “dificulta lograr el objetivo de llevar los índices de contagios por el coronavirus a su mínima expresión”.
El resultado de los operativos realizados este sábado 17 de octubre, fue la detención de 1,535 personas “que se encontraban en las calles sin justificación, de las cuales 361 estaban sin mascarillas”.
El toque de queda continua por otros 25 días en el mismo horario ya establecido. Con la medida se busca reducir los contagios del COVID-19 en el país.