El juicio preliminar del caso Odebrecht fue recesado hasta el jueves a las 9 de la mañana, luego de cinco días de audiencias consecutivas.
Hoy se tenía previsto que el Ministerio Público presentará sus conclusiones de la acusación formal en contra de los siete implicados del caso y su solicitud de acreditación de pruebas, sin embargo solo pudo exponer la calificación jurídica por varios incidentes planteados por la barra de la defensa.
Entre ellos estaba la designación de intérpretes para traducir los documentos, que se aportarán como prueba por parte del Ministerio Público, del portugués al español, pedido que fue rechazado por el juez de la Instrucción Especial de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), Francisco Ortega Polanco, quien además dispuso que los intérpretes judiciales que lo auxiliarán estén presente en la audiencia.
Asimismo, los abogados de Ángel Rondón solicitaron que sean leídos en esta fase los referidos documentos, ya que alegan están divergisados por el Ministerio Público, incidente que también fue rechazado por el magistrado.
El Ministerio Público indicó que los abogados de los imputados no pueden intervenir para hacer señalamientos por cada prueba presentada.
El fiscal Milciades Guzmán afirmó que esto es contrario a lo que se debe hacer en una audiencia preliminar, que es para discutir la legalidad de las pruebas.