Una adolescente de 16 años de edad falleció alegadamente luego fumar un cigarrillo eléctrico, un hecho ocurrido en el sector Jobo Bonito, en San Francisco de Macorís.
La occisa fue identificada como Orvianny de Aza López, quien murió producto de un paro cardíaco, de acuerdo al médico legista actuante en el caso.
Trascendió que la menor inhalaba de manera constante el referido aparato electrónico.
A pesar de que en reiteradas ocasiones los médicos han advertido sobre los riesgos a la salud que generan estos cigarrillos, un número considerable de jóvenes continúan utilizandolos.
Los especialistas aseguran que esos dispositivos contienen sustancias nocivas que provocan problemas respiratorios.
Hasta el momento las autoridades no han informado los resultados de los estudios forenses realizados al cadáver de la adolescente.