Por José Alfredo Espainal
Santiago, .- Para el jurista y experto en materia laboral, Julián Serulle, el Estado dominicano debe intervenir de manera directa, permanente y constante el manejo de los más de RD$500 mil millones que han ido acumulando las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), como consecuencia del dinero que les aporta la clase trabajadora del país.
Serulle entiende que las autoridades deben velar si ese monto millonario tiene un norte de inversión y soporte a las empresas nacionales con garantías correspondientes y buscando la seguridad de un porcentaje en los intereses que pueda redundar en la multiplicación con escala geométrica para ir nutriendo esa cuenta del trabajador para su futuro plan de pensiones
“Si no se toma en cuenta esa realidad, mañana podríamos ver escapar y esfumar todo ese dinero, sudor y ahorro de trabajadores con la cooperación solidaria por parte de los empleadores, para quienes ese 7% que aportan del salario puede constituir en un anti-coste de producción”, dijo en declaraciones ofrecidas a reporteros de Caribbean Digital.
Por esa razón, cree que se requiere intervención de directa, permanente y constante del Estado dominicano, a través del Gobierno central y este a través de las planificaciones correspondientes.
Julián Serulle ve conveniente que se modifique la Ley 87-01 que crea el Sistema Dominicano de Seguridad Social, cuyo proyecto fue sometido en marzo pasado por el Poder Ejecutivo ante el Congreso Nacional.
“Esta ley es altamente privatizadora, por tanto los beneficios caen en las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) y a su vez no existen garantías de que los intereses que generen la inversión puedan ir provocando la acumulación del dinero necesario para cuando una persona pase a ocupar la posición de pensionado y se corre el riesgo de cuando se vivió en la década de los 80, de las quiebras masivas y escalonadas de AFP desde Chile, Argentina, Colombia, Bolivia, ante el derrumbe de los Tigres Asiáticos y las inversiones en particular en el mundo energético”, afirmó.
Sostuvo que el dinero tiende a la devaluación en países latinoamericanos, sin dejar de lado la inflación en los precios de los productos de primera necesidad, lo que puede provocar, según el experto, que en un momento dado el dinero que reciba el trabajador no represente un real y auténtico poder adquisitivo para él y su familia.