El juez José Alejandro Vargas calificó como «ilógico e irracional» el pedido de aplazamiento de la medida de coerción de los imputados en la Operación Antipulpo.
Vargas señaló que cuando se les dijo a los representantes de los imputados que para cuando sería conocida la medida de coerción, ellos decidieron que sería para este domingo por que «de ninguna manera se va a aplazar».
«Es muy bueno usted pedir cuando no es el que está preso», señaló al referirse al pedido de la defensa de exministro de Salud Pública, Freddy Hidalgo y del ex contralor de la República, Rafael Germosén para aplazar la medida de coerción.
El juez dijo que se aplazara por lo que realizó un receso de 45 minutos para que más partes se pongan de acuerdo.
Señaló que el pedimento por falta de conocimiento de uno de los abogados de conocer el caso es «ilógico, irracional y sin ningún tipo de condescendencia» con las personas que representa.
Manifestó que los acusados tienen derecho a que el Tribunal le cumpla sus derechos y que no puede mantenerlo en un «suplicio».
Alegó que es una medida de coerción y que, si se toman en cuenta esos planteamientos, el sistema judicial no tiene que cargar con la falta de conocimiento de los defensores.