La Iglesia católica denunció que un grupo de “comunicadores y periodistas” se dedican desde hace varios años en el país al “ejercicio inmoral” del “chantaje” y la “extorsión” contra empresarios, funcionarios y otras personas con informaciones falsas o tergiversadas a través, principalmente a través de las redes sociales para exigir dinero a cambio de desistir de las publicaciones.
Al leer la séptima palabra del Sermón de las 7 Palabras, el sacerdote Arsenio Ferreira dijo que la práctica consiste en ubicar a las posibles víctimas averiguando los negocios a los que se dedica y “generarle informaciones” dudosas para luego enviarles un emisario a solicitar “alta suma de dinero”.
“Esta práctica está tomando cada vez más fuerza, pues quienes la ejecutan son personas sin escrúpulos, que solo buscan dinero a toda costa y que no tienen reparos en decir a lo que se dedican, como en algunos medios ya lo han hecho”, leyó el padre Ferreira.