Carmen Magalys Medina Sánchez mientras era procesada en el caso Antipulpo
POR PEDRO MARTIN SANCHEZ
Fernando Manuel Rosa Rosa y Carmen Magalys Medina Sánchez, presidente y vicepresidenta, respectivamente, del Fondo Patrimonial de las Empresas Reformadas (Fonper) se entregaron sus prestaciones laborales una semana antes del cambio de gobierno, una violación a la ley de función pública, según la Cámara de Cuentas.
Rosa Rosa tenía un salario mensual de RD$521,333 y cobró una prestación de RD$6,042,264 y Medina Sánchez, tenía un salario de RD$326,400 y cobró una liquidación de RD$3,931,156.
Según la auditoría de la Cámara de Cuentas, la salida de Rosa Rosa y Medina Sánchez del Fonper no fue aprobada por el Consejo. Además, que, según la Ley 41-08 de Función Pública, al presidente y vicepresidentes no les toca prestaciones laborales.
El 8 de agosto del 2020, a Rosa Rosa le fue dictada prisión preventiva y a Medina Sánchez domiciliaria, como medida de coerción por vínculos al caso Antipulpo, mediante el cual el Ministerio Público dice que Alexis Medina Sánchez estableció una supuesta red criminal a nivel operativo para enriquecerse con el dinero del pueblo, aprovechando su condición de hermano del entonces presidente de la República, Danilo Medina Sánchez, quien agotó dos períodos constitucionales entre 2012 y 2020.
Nepotismo
Los auditores de la Cámara de Cuentas verificaron, además, que doce empleados tenían vínculos de consanguinidad y una estaba relacionada con funcionarios. A ellos se les realizó pagos por RD$52,821,069.
En detalles, Ulises Rosa Liz, primo del presidente Fernando Rosa, se desempeñaba como encargado de Contabilidad, con un sueldo de RD$197,731.
Claudio Domingo Sánchez, primo de Carmen Medina, era el encargado de Servicios Generales con un salario de RD$137,443. Su sobrina, Chaily Massiel Rosado Medina, era encargada de Proyectos de Construcción con un sueldo de RD$164,325 y su otro sobrino, Miguel Sánchez Comas, era encargado interino de Servicios Generales, con un sueldo de RD$80,000.
María Esther Fernández Cedeño era encargada de Financiero y su sobrina Isolina H. Pérez Fernández devengaba un salario de RD$56,875 como analista de Contabilidad.
Juana Evangelista de los Santos era la encargada de Compras y Contrataciones, sin embargo, su hijo Juan Carlos Cruz de los Santos era analista de Planificación y Desarrollo con un salario de RD$46,800.
Diosmari Gisella de la Rosa se desempeñaba como coordinadora de Desarrollo Social y su hija Zoila Gisselle Debora Moreno de la Rosa era analista de Gestión Patrimonial con salario de RD$45,500.
Leonarda Altagracia Mendoza García era conserje y su sobrino, Richard Ramón Mejía Mendoza, cobraba RD$32,500 como auxiliar de Suministro.
Francisco Pérez Carlos ocupaba el cargo de mensajero externo y su sobrino, José Montilla Pérez, era técnico administrativo con un salario RD$45,000.
Y Ana Ramona Mendoza García era auditora de Contraloría y su hijo Richard Ramón Mejía Mendoza ganaba RD$32,500 como auxiliar de Suministro, y su otro vástago ganaba RD$10,000 en un puesto no especificado.