SANTO DOMINGO. La oftalmóloga Xiomara Acosta, del Instituto de la Ceguera, reveló que los problemas más frecuentes por los cuales las personas acuden al oftalmólogo tienen que ver con las dificultades para ver de lejos, de cerca o cansancio visual y que alrededor de un 30% de la población usa lentes como consecuencia de la disminución de la visión.
Expuso que a partir de los 40 años la visión de cerca se va dificultando porque va apareciendo la presbicia, que es la incapacidad para ver de cerca.
“Los problemas más frecuentes de la visión son la miopía, las hipermetropía y el astigmatismo, pero existen otras condiciones, como pueden ser las cataratas, el glaucoma, los problemas de la retina”, subrayó al ser entrevistada por el periodista Federico Méndez, en el programa Esferas de Poder, que se transmite por Santo Domingo TV,
La experta explicó que la catarata es básicamente una patología de personas adultas, como consecuencia de traumas, inflamaciones, infecciones, pero también pueden ser congénitas.
“Es una causa muy importante de ceguera en el país (…). Las cataratas constituyen, no solamente en el país, sino en el mundo, una de las principales causas de ceguera y es prevenible”, enfatizó.
La doctora Acosta observó que el único tratamiento de las caratas es la cirugía, pero las técnicas actuales son tan especializadas que permiten una recuperación rápida del paciente y la hacen ambulatoria que dure entre diez y 15 minutos.
Indicó que la operación no requiere que el paciente se encuentre hospitalizado.
Manifestó que existen alrededor de 33,000 personas ciegas por patologías, como las cataratas, que se pueden prevenir.
“Hay otros tipos de causas, como por ejemplo el glaucoma, que es cuando el aumento de la presión existe dentro del ojo, que daña el nervio óptico”, precisó.
La oftalmóloga advirtió que el glaucoma se conoce como el enemigo silente porque solamente presenta síntomas cuando la enfermedad está muy avanzada.
“En este caso (en el de glaucoma) sí se produce una ceguera irreversible, de ahí es la necesidad la necesidad de que las personas se hagan una evaluación oftálmica por lo menos cada dos años”, puntualizó.
Acosta dijo que la diabetes ocasiona también la retinopatía diabética, que causa daños a los vasos sanguíneos de la retina, que es la capa interna del ojo sensible a la luz que se encarga de enviar información visual al cerebro a través del nervio óptico para hacer posible la visión.
Agregó que la miopía es hereditaria porque el paciente nace con ella y existe un porcentaje elevado de personas que la padecen.