SANTO DOMINGO…El empresario Quilvio Bienvenido Rodríguez González, admitió, a través de su abogado, que durante años pagó sobornos a los militares que estaban a cargo de la seguridad y las compras de las Empresas Distribuidoras de Electricidad (EDE), la ARS gubernamental Senasa y en el Instituto de Atención Integral a la Primera Infancia (Inaipi), a fin de captar y mantener contratos para resguardar las instalaciones de esas instituciones públicas.
Los imputados mientras salían del tribunal.
Según Carlos Balcácer, representante legal de Rodríguez González, el Estado «no ha perdido un peso», pero sí su cliente, «la gran víctima» que debió pagar las exigencias de los funcionarios, que era de un 10 por ciento del valor total de la facturación mensual de su empresa.
Según el Ministerio Público (MP), los sobornos identificados ascienden, por el momento, a 108 millones de pesos entregados a los nueve imputados, ocho de ellos militares de alto rango.