Militares estadounidenses se desplegaron en Puerto Príncipe para reforzar la seguridad de la Embajada de Estados Unidos en Haití y evacuar al personal no esencial, en un momento en que las bandas armadas han convertido las calles en un campo de batalla.
El objetivo de la operación era fortalecer la seguridad de la embajada para garantizar que siga funcionando, según explicó en un comunicado el Comando Sur de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, responsable de las operaciones en Latinoamérica.
Además, la operación buscaba asegurar la salida del país del personal no esencial.
La misión se llevó a cabo con una aeronave militar, de la que no se ofrecieron detalles, excepto que no había haitianos a bordo de la misma y solo se transportó a personal que trabaja para el Gobierno estadounidense.
«Este traslado aéreo de personal dentro y fuera de la embajada es consistente con nuestra práctica estándar para reforzar la seguridad de las embajadas en todo el mundo», señaló el Comando Sur de Estados Unidos.
Una portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, encargado de la política exterior, informó a EFE que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, personalmente dio luz verde a la misión.
«El presidente Biden aprobó la operación. Ha sido informado, recibe actualizaciones de su equipo y está profundamente preocupado por la situación en Haití«, indicó la portavoz.
La operación estadounidense tuvo lugar mientras continúan los ataques de bandas armadas en el área metropolitana de Puerto Príncipe, incluida Tabarre, donde se encuentra la embajada de Estados Unidos.