SANTIAGO.. R…D...- Los accidentes de tránsito que se registran en el país, con un alto saldo de muertos y lesionados permanentes, han convertido en “un verdadero cementerio a República Dominicana”, consideró el veterano dirigente choferil, Miguel Sánchez.
Sánchez atribuyó a diversos factores estos accidentes e hizo varias recomendaciones para su disminución.
Entiende como urgente que se busquen soluciones para evitar más muertes y lesionados en las carreteras dominicanas e insta a los sectores involucrados en el sector transporte a contribuir para amortiguar la situación.
A su juicio, en primer lugar, el presidente del Sindicato Nacional de Choferes de Santiago, Incorporado, considera que los conductores que se desplazan por calles y carreteras deben respetar los límites de velocidad y olvidarse de los celulares mientras están al frente del volante.
“Asimismo, -comentó- evitar conducir cuando se están cansados y además deben revisar sus vehículos para garantizar que todo está bien y que no haya ningún problema en el camino”.
“Si esto se hace correctamente, como es debido, se impedirá que hayan tantos accidentes que lleven el luto y el dolor a los hogares dominicanos”, reflexionó Sánchez.
“Y es que los frecuentes choques de vehículos y otros hechos en calles y carreteras han convertido el país “en un cementerio”. El más impactante de todos ocurrió en Azua, hace apenas días, cuando el chofer de un camión cargado de aguacates impactó una multitud que disfrutaba en plena vía dejando un saldo de 7 muertos y decenas de lesionados”, precisó.
Pero Miguel Sánchez estima también que las autoridades deben poner de su parte y comenzar a iluminar todas las autopistas y otras carreteras del país que durante las noches están “como bocas de lobos”.
También se requiere de la fiscalización en los tramos de mayor tránsito para que los transportistas sepan que tienen garantizada la vigilancia. Además, se deben prohibir los teteos en medio de las calles y carreteras.
“Los accidentes, -considera Sánchez- constituyen un grave problema de todos los sectores en general y, por consiguiente, todos debemos aportar nuestro granito de arena para tratar de reducirlos a su mínima expresión, por la seguridad vial y la paz social”,