SANTIAGO…R.D… Con la voz quebrada por el dolor, Grisely Paulino expresó su clamor de justicia tras la muerte de su hija Grismarlin Paulino, una adolescente de 13 años que falleció luego de recibir un disparo de arma de fuego, presuntamente realizado por su primo, también menor de edad.

«Ella danzaba en la iglesia, evangelizaba. Yo solo quiero justicia. ¿Por qué no me la hirió en una pierna? Me la mató de un tiro en el cuello», dijo entre sollozos la madre, aún incrédula ante la tragedia que sacudió a su familia.
El hecho ocurrió en el sector El Tamarindo de La Herradura, en la provincia Santiago, generando consternación entre familiares, vecinos y compañeros de iglesia. La madre narró que horas antes había hablado con su hija, quien le aseguró que no saldría de casa.
«Yo no tenía ni dos horas que había hablado con ella. Me dijo: ´Mami, yo estoy bien´. Y cuando llegué, ya mi niña estaba sin vida», relató con profundo dolor la madre, mientras pedía justicia.
Grismarlin cursaba el segundo grado de secundaria en el Liceo Profesor Juan Bosch y pertenecía a la iglesia cristiana Jesús Hace Milagros, donde era danzora.