La coordinadora general del movimiento cívico no partidista, Participación Ciudadana, Miriam Díaz Santana, afirmó que no solo esa entidad no reconoce avances en la transparencia, manejo de los recursos y combate a la corrupción administrativa, sino el pueblo dominicano, ya que las encuestas revelan que la gente entiende que en el país hay igual o más corrupción.
En ese sentido, Díaz Santana citó que la última Encuesta Gallup revelaba que el 88% ciento de las personas en la República Dominicana entiende qué hay igual o más corrupción, tras precisar, que eso nadie lo puede negar.
Indicó que ella quisiera que le digan cuáles son los avances qué hay del control de la corrupción y qué se ha hecho al respecto, “No se ha hecho ninguno…porque cada vez que sale un escándalo se ve que hay personas que actúan sin ninguna clase de control e incluso se hacen denuncias sobre lo que esas personas están haciendo, y el Gobierno no hace caso hasta que no ocurre una desgracia”, aseguró.
La socióloga dijo que en el país siempre se ha sabido que hay corrupción en todos los gobiernos, sin embargo, manifestó que antes se entendía que no era importante, ya que hace 10 o 15 años el tema de corrupción aparecía en las encuestas en los últimos lugares, pero hoy está en los primeros lugares.
Destacó que la gente ha ido tomando conciencia de que ese es un problema que afecta a toda la población, no sólo a pequeños grupos, y que está relacionado con muchos de los déficits que hoy existen en educación, salud e inversión pública en general.
Citó que recientemente se estableció en el Banco Mundial que unos 163 mil millones de pesos anuales se desperdician en el país, lo que a su entender, revela un uso no racional del dinero. “Imagínese la parte que no aparece que se refiere a sobornos y otras acciones ilícitas”, deploró.
Díaz Santana sostuvo que están participando desde el principio en la Marcha Verde con el propósito de que se acabe la impunidad en la República Dominicana. Considera que ese es un movimiento abierto a diferentes planteamientos y corrientes, aunque hay grupos y personas que plantean posiciones más radicales, pero, esas no han sido las enarboladas.