Abraham Trinidad Reyes, el albañil que cavó y cubrió el hoyo donde fue ocultado el cuerpo del empresario Fausto Reyes Tejada, en La Vega, explicó que fue contratado para quitarle «profundidad» a la piscina de la vivienda ubicada en el sector Villa Francisca II.
«Me dijo: Hazme una plateíta, pónmele cuatro líneas de blocks y unos escaloncitos para que las niñas mías estén más cómodas porque ahí se me pueden ahogar», explicó Trinidad Reyes, quien fue contactado por la Policía para ser investigado.
Agrega que, tras concluir su trabajo, Edwin Alberto Holguín Robles, amigo de la víctima, volvió a buscarlo al día siguiente para que hiciera un bordillo delante de la piscina con la excusa de que la iba a pintar. Cobró 13 mil pesos por el trabajo, más mil que el propietario de la vivienda le regaló.
Tras enterarse que en ese lugar se había sepultado al asesinado Reyes Tejada, el albañil dijo que nunca esperaría que un ser humano le hiciera eso a un amigo.
«Eso es no tener consciencia, esos no son amigos, son animales», enfatizó el albañil a indicar su indignación.
Reyes Tejada, quien fue reportado como desaparecido, fue amordazado y asesinado. Luego, entraron el cadáver dentro de una maleta roja y negra, que se colocó dentro de una camioneta Nissan Frontier 2018, blanca, propiedad del fallecido.
Posteriormente, los imputados trasladaron la maleta a la residencia de Holguín Robles, donde este reside con su pareja.