POR AP
La cifra de muertos por el consumo de cocaína presuntamente adulterada en Buenos Aires ascendió el a 17 y más de medio centenar de personas se encontraban hospitalizadas, muchas en grave estado, mientras las autoridades estaban abocadas a una búsqueda frenética de más dosis del mismo traficante para evitar nuevas intoxicaciones.
“Este hecho es absolutamente excepcional, no tenemos ningún antecedente”, dijo el fiscal general de San Martín, Marcelo Lapargo, al canal de cable local Todo Noticias. “Si la situación ha escalado, si ha cambiado la naturaleza del tráfico a tal punto que esto se vuelva habitual, espero no verlo jamás”.
La principal hipótesis es que la droga fue adulterada intencionalmente en el marco de un presunto ajuste de cuentas, indicó el funcionario judicial a cargo de la investigación.
Los expertos aún analizan la droga para determinar la causa de las intoxicaciones.
Las primeras informaciones oficiales daban cuenta de ocho muertos entre un mismo grupo de personas que habían comprado la droga el martes. Con el correr de las horas la cifra de víctimas aumentó y no se descartan más decesos, ya que varios de los hospitalizados están en gravísimo estado.
El ministerio de Salud de Buenos Aires emitió un alerta epidemiológica tras constatar que continúan ingresando en las guardias de distintos hospitales provinciales personas con “signos de shock, depresión del sensorio, dificultad respiratoria, excitación psicomotriz y que presentaban antecedentes de consumo reciente de cocaína”, según un comunicado