Los obispos de la República Dominicana expresaron su preocupación por la reciente propuesta de reforma fiscal presentada por el Gobierno, destacando la importancia de abordar este proceso con un enfoque humanista y socialmente equitativo. En un comunicado, subrayaron la necesidad de un diálogo abierto que incluya a todos los sectores de la sociedad, con especial atención a los más vulnerables.
“Valoramos los esfuerzos del Gobierno por fortalecer la economía nacional, pero cualquier ajuste debe realizarse con justicia social”, indicaron los obispos, resaltando el impacto que las nuevas medidas fiscales podrían tener en la población de ingresos medios y bajos.
Asimismo, hicieron un llamado a las autoridades a controlar el gasto público y combatir la corrupción en la administración de los recursos. Según los obispos, una reforma fiscal no debe profundizar las desigualdades, sino promover una distribución equitativa de la riqueza. “El Estado tiene el deber de garantizar condiciones para un desarrollo inclusivo”, agregaron, citando la doctrina social de la Iglesia.
Finalmente, confiaron en que este proceso de reforma fiscal se llevará a cabo con transparencia y apertura, pidiendo la intercesión de la Virgen de la Altagracia para guiar a las autoridades hacia decisiones justas y solidarias.