La coalición de grupos populares de la región del Cibao denunció el apresamiento de aproximadamente 50 de sus integrantes en San Francisco de Macorís y 30 en la ciudad de Moca, en medio del llamado a huelga de esas organizaciones.
Osvaldo Brito, dirigente popular del Frente de Lucha, Unidad y Progreso (FLUP), denunció la acción de la uniformada y expresó que «estamos demandando la libertad de los compañeros detenidos en San Francisco de Macorís y que cese la represión, que no es posible seguir dando un trato de guerra a las protestas y manifestaciones cívicas y pacíficas como se están desarrollando en el Cibao».
Por otro lado, manifestó que los supermercados son un centro de fusilamiento económico y que el gobierno se ha hecho el sordo y mudo ante los reclamos comunitarios como la falta de construcción de hospitales, acueductos, caminos vecinales, aceras y contenes.
Por su parte, en su intervención, Raquel Rivera, dirigente del Movimiento Feminista Hermanas Mirabal, subrayó que el gobierno solo se ha enfocado en beneficiar a los grandes empresarios y sostuvo que «donde más ha invertido el gobierno es en la región del Cibao, pero esas inversiones no se han convertido en mejorar la calidad de vida de los hombres y mujeres del pueblo, muy por el contrario, los pequeños y medianos productores han ido a la quiebra».