
POR AP
ORLANDO. Un hombre armado con un fusil de asalto y una pistola abrió fuego dentro de un abarrotado club nocturno gay, donde privó de la vida a 50 personas y fue abatido en un enfrentamiento con agentes de élite, informó la policía. Es la mayor matanza a tiros perpetrada en la historia de Estados Unidos.
Las autoridades investigan si los hechos ocurridos en el club de baile en la Florida fueron un acto de terrorismo. El padre del agresor recordó que su hijo se enfureció recientemente cuando vio a dos hombres besarse en Miami y señaló que esa situación podría estar relacionada con el ataque.
El agresor llamó al número de emergencias 911 antes de la matanza e hizo una referencia al grupo extremista Estado Islámico, dijo Ronald Hopper, agente del FBI.
Al menos 53 personas fueron hospitalizadas, la mayoría en estado crítico, dijo la policía. Un cirujano en el Centro Médico Regional de Orlando indicó que quizá aumente el número de víctimas fatales.
“Hay sangre por doquier”, declaró el alcalde de Orlando, Buddy Dyer.
Todas las víctimas fatales murieron por disparo de fusil de asalto, según el representante demócrata Alan Grayson, de Florida.
Los testigos describieron una escena caótica cuando comenzó el ataque poco antes de que cerrara el club Pulse.
“Un tipo entró y comenzó a disparar contra todos. Tenía un fusil automático, por eso nadie contaba con ninguna oportunidad” de hacer nada para detenerlo, declaró Jackie Smith, que tenía dos amigos que sufrieron heridas de bala. “Yo sólo intentaba salir del lugar”.
El sospechoso fue identificado como Omar Mateen, estadounidense de 29 años que vivía en Port St. Lucie, Florida, el cual había trabajado como guardia de seguridad. La exesposa de Mateen dijo que la familia de él era de Afganistán pero que su exmarido había nacido en Nueva York. La familia de Mateen se mudó después a Florida.